Los tumores en las vías biliares se conocen como colangiocarcinomas y pueden ser de diferentes tipos, dependiendo de su ubicación y características celulares.
La bilis es un líquido producido por el hígado que ayuda en la digestión de las grasas. Los conductos biliares son los encargados de transportar la bilis y asegurar su correcto flujo hacia el intestino. Cuando se forma un tumor en estas vías, se pueden presentar diversos problemas y complicaciones.
Los tipos de tumor en la vía biliar pueden ser:
Cáncer de vías biliares intrahepáticas: este tipo de cáncer se forma en los conductos biliares dentro del hígado. Solo una pequeña cantidad de los cánceres de vías biliares son intrahepáticos. Los cánceres de vías biliares intrahepáticas también se llaman colangiocarcinomas intrahepáticos y cánceres de conducto biliar intrahepático.
Cáncer de vías biliares extrahepáticas: este tipo de cáncer se forma en los conductos biliares fuera del hígado. Los dos tipos de cáncer de vías biliares extrahepáticas son el cáncer de vías biliares perihiliares y el cáncer de vías biliares distales.
Cáncer de vías biliares perihiliares: este tipo de cáncer se encuentra en el área donde los conductos hepáticos derecho e izquierdo salen del hígado y se unen para formar el conducto hepático común. El cáncer de vías biliares perihiliares también se llama tumor de Klatskin, colangiocarcinoma perihiliar, colangiocarcinoma hiliar o cáncer de conducto biliar perihiliar.
Cáncer de vías biliares distales: este tipo de cáncer se encuentra en el área donde los conductos que salen del hígado y la vesícula biliar se unen para formar el conducto colédoco. El conducto colédoco pasa por el páncreas y termina en el intestino delgado. El cáncer de vías biliares distales también se llama colangiocarcinoma extrahepático y cáncer de conducto biliar extrahepático.
Una de las señales de alerta de esta enfermedad son:
- Ictericia (la piel y la parte blanca de los ojos se vuelven amarillentos).
- Orina oscura.
- Heces de color arcilla.
- Dolor en el abdomen.
- Fiebre.
- Picazón en la piel.
- Náuseas y vómitos.
- Pérdida de peso por motivos desconocidos.
Estos síntomas pueden ser causados por otros problemas de salud, por lo que es importante realizar pruebas y exámenes para confirmar su diagnóstico.
El tratamiento de los tumores en las vías biliares puede incluir cirugía para extirpar el tumor y la quimioterapia y/o radioterapia para destruir las células cancerosas restantes, este va a depender del tamaño y ubicación del tumor, así como de la salud general del paciente.
En el Instituto Ecuatoriano de Enfermedades Digestivas (IECED) se realiza el procedimiento endoscópico terapéutico denominado CPRE uno de los procedimientos específicos para detectar para diagnosticar problemas en las vías biliares. Según explica el Dr. Juan Manuel Alcívar, gastroenterólogo y endoscopista de IECED. este procedimiento se caracteriza por trabajar sobre la vía biliar tratando distintos tipos de problemas como:
- Piedras del conducto biliar
- Obstrucciones de la vía biliar sea por estenosis de tipo maligna (tumores) o benigna
Cabe recalcar que cada caso de tumor en las vías biliares es único y debe ser tratado de manera individualizada por un equipo médico especializado. Los avances en la investigación y el tratamiento del cáncer han permitido mejorar las tasas de supervivencia y la calidad de vida de los pacientes con tumores en las vías biliares. Sin embargo, la detección temprana sigue siendo fundamental para un mejor pronóstico.
